TESTIMONIO DEL PASTOR AMADEO CONDORI DE LA IGLESIA EVANGÉLICA PENTECOSTAL DEL PERÚ EN MARCONA
TESTIMONIO DE NUESTRA HERMANA JULIA ELÍAS RAMOS DE ANGULO
TALLER DE MUJERES EN ICA, COMPARTIENDO EL APOSENTO ALTO
COMPARTIENDO CON LOS JÓVENES EL APOSENTO ALTO Y SUS USOS
JUNTO A NUESTRAS HERMANAS DE THE UPPER ROOM: SARAH WILKE DIRECTORA EJECUTIVA Y BLANCA LONGHURST COORDINADORA, RELACIONES HISPANAS - LATINAS.
LECTURA DEL APOSENTO ALTO, DURANTE EL ENCUENTRO DE MUJERES METODISTAS DE AMERICALATINA Y EL CARIBE, REALIZADO EN KAWAI - PERÚ
PASTOR JUBILADO DE LA IGLESIA PENTECOSTAL DE MARCONA EN NAZCA, DESDE HACE 20 AÑOS COMPARTE LA LECTURA DEL APOSENTO ALTO ENTRE LOS PASTORES MÁS JOVENES DE MARCONA, SU TESTIMONIO DE COMO LLEGO AL MINISTERIO PASTORAL POR EL USO DEL APOSENTO ALTO, LO COMPARTIREMOS EN LOS PRÓXIMOS NUMEROS.
PASTOR AMADEO CONDORI
PROFESORES Y ALUMNOS DEL COLEGIO AMÉRICA DE LA VICTORIA, LIMA - PERÚ, DANDO USO DEL APOSENTO ALTO AL INICIO DE CLASES.
70 FORMAS DE COMPARTIR EL APOSENTO ALTO
- Un recurso para la meditación personal y la evangelización con presencia en todo el mundo.Hace 75 años, un grupo de mujeres, con oración y esfuerzo, iniciaron el proceso que llevó a la creación de la Guía de Meditaciones Diarias El Aposento Alto. Ellas identificaron una necesidad, reflexionaron sobre lo que podían hacer, y plantaron la semilla de fe. El Aposento Alto, que actualmente se publica en 44 idiomas y 73 ediciones, provee refrigerio espiritual a 3 millones de personas alrededor del mundo, que encuentran tiempo para leer y orar cada día. Le ofrecemos sugerencias acerca de cómo usted y su iglesia pueden usar esta guía de meditaciones para su crecimiento espiritual, y para ofrecer aliento a aquellas personas que lo necesitan. Estas son maneras utilizadas por diferentes personas que han tenido a bien compartirlas con nosotros.
- 1. Únase a millones de personas cristianas alrededor del mundo que leen y oran cada día usando esta pequeña guía de meditaciones. El ritmo diario de lectura de la Escritura, meditación y oración nos ayuda a crecer en la fe al establecer una disciplina diaria de comunión con Dios.
- 2. Coloque El Aposento Alto en un lugar visible, tal como una mesa o un gabinete en la cocina, de modo que lo vea frecuentemente durante el día. Cada vez que lo vea, recuerde y dé gracias a Dios por su presencia y su actividad amorosa en suvida diaria.
- 3. Memorice el versículo bíblico incluído en la meditación de ese día. Reflexione en su significado durante el día con todo su corazón y su mente.
- 4. Recorte y entregue meditaciones específicas a las amistades que estén pasando por situaciones parecidas. Muchos de nuestros lectores nos comentan que están convencidos de que las meditaciones han sido escritas específicamente para ellos y su situación.
- 5. Envíe una copia de El Aposento Alto con sus tarjetas de cumpleaños, de pésame u otro motivo parecido. Le puede costar un poco más enviarla por correo, pero quien reciba El Aposento Alto se sentirá muy feliz.
- 6. Lleve siempre una copia con usted. Sin hablar mucho, usted puede ayudarle a otra persona a encontrar el camino a la fe.
- 7. Deje una copia en lugares públicos que visite, tales como lugares de trabajo, restaurantes, salas de espera y baños. Confíe en que Dios usará este sencillo medio para tocar la vida de otra persona.
- 8. Incluya El Aposento Alto entre los regalos que le dé a sus familiares y amistades. Ellos apreciarán su gesto.
- 9. Obsequie suscripciones de regalo a sus seres queridos. El Aposento Alto es un regalo que pueden abrir cada día del año.
- 10. Escriba una meditación personal y envíela a El Aposento Alto. Al hablar de su experiencia personal sobre la fidelidad de Dios estará ayudando a millones de personas a prestar atención a la obra de Dios en sus propias vidas.
- 11. Tenga su copia de El Aposento Alto siempre consigo de modo que pueda leerla mientras espera ante un semáforo o el consultorio médico.
- 12. Coloque copias adicionales en su maletín o cartera. Compártala con sus amistades y colegas de trabajo que necesiten una palabra de aliento.
Fuente: The Upper Room
